domingo, enero 13, 2008

A veces hay que dejar que el suelo se cubra de hojas

Estaba reflexionando sobre lo absurdo que resulta en nuestro tiempo del vegetarianismo por razones éticas en un sitio interesante: //todofluye.wordpress.com/, un interesante blog sobre filosofia titulado "panta rei" (todo fluye). Ahí comentaba cómo la defensa del vegetarianismo de Pitágoras de Samos, muy razonable en su momento, carecía de sentido actualmente.
El caso es que recordé una historia:

Hace mucho tiempo mi padre me hacia limpiar el jardin y el huerto en otoño. Pasaba el dia limpiando y ordenando todo, barriendo, recogiendo cosas, preparando las plantas para el invierno y recogiendo y ayudando en la interminable obra de nuestra casa.
Él revisaba la tarea y decia "no esta bien. Tienes que limpiar mejor. Continua mañana". Así pasaban un par de fines de semana, pues entre semana me dedicaba a las cosas normales de cualquier crio, como ir a clase, donde aprendía mucho menos que en cualquier otra parte y era un tramite que deseaba pasar lo mas rápidamente posible. El caso es que al tercer fin de semana yo estaba cansado y mosqueado, así que dejé de barrer las hojas que cubrian las terrazas y suelo. El vino y dijo "ahora si esta bien limpio". Yo pensaba que durante todo el tiempo me tomaba el pelo y empezaba a pensar que no estaba bien de la cabeza. Entonces me explicó: "lo natural es que en otoño caigan las hojas. Sólo un loco pretende tener su suelo limpio de las hojas de otoño. Déjalas caer y cuando no queden hojas en los árboles, barrelas todas una sola vez"
Supongo que en la vida hay que saber cuando debemos dejar que el suelo se cubra de hojas.

Tambien me dijo mi padre: -Hijo, cuando uno es pequeño siempre piensa "mi padre sí que sabe de todo". Luego, cuando uno tiene tu edad, piensa "mi padre no tiene ni idea. Es mas, igual esta chocheando". Y despues, cuando yo ya no esté en este mundo, pensarás "mi padre sí que sabía...."
Por dios que tenía razón. Aquellas viejas historias de crío, como la nieve del invierno...dan su beneficio en primavera...o mas bien, en este caso, quiza lo den en otoño ya.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Muy bueno tu blog, amigo John. Lo estaré visitando con frecuencia.

Dejé una respuesta en mi blog a tu interesante comentario.

Por lo visto, tu padre expresaba la eterna sabiduría taoista en sus enseñanzas. ¡Qué afortunado haber contado con un maestro así! Espero seguir leyendo sobre las lecciones que te impartió.

Mucha felicidad para ti y los tuyos.